Lograr marcar el abdomen ha pasado a estar en la lista de “metas no alcanzadas” de muchos, y es que más que esfuerzo, requiere de mucha disciplina y persistencia.
¿Por qué es tan difícil marcar el abdomen?
La principal causa por la que marcar tu abdomen sea tan difícil es que la zona abdominal es el lugar donde el cuerpo acumula más grasa, e incluso, estando dentro del peso correspondiente, es normal que haya una capa de grasa tapando ligeramente la masa muscular.
Esta capa se hace más difícil de quitar mientras van avanzando los años, por eso, aunque no podemos decir cuando es demasiado tarde, si en verdad quieres lograrlo, necesitas conocer el secreto que muchos parecen ignorar.
El secreto para marcar el abdomen, no es ningún secreto.
Si tuviéremos que distribuir en porcentajes los factores que influencian la marcación abdominal, esta sería nuestra respuesta:
10% Genética 40% Ejercicio adecuado 50% Dieta
Existen casos en los que la composición corporal y la influencia genética en la respuesta del cuerpo, pueden ser un reto a superar, pero la genética solo influye un porcentaje mínimo, por lo que no puede tomarse en cuenta jamás como un limitante.
Por otro lado, muchos aún creen que pasar horas muertas en el gimnasio enfocándose en trabajar el área abdominal es la divina solución, pero aunque el ejercicio adecuado se apropie de un digno porcentaje, por sí solo, jamás te ayudará a conseguir tu privilegiado “six pack”
Entonces, ¿qué es lo que necesitas hacer para marcar el abdomen?
La respuesta es, la dieta. Y cuando hablamos de dieta no hacemos referencia a una cantidad penosa y mínima de alimentos naturales que aportan bajas calorías en general y te sientes sin fuerzas todo el día.
Es importante entender que, cuando ya estás dentro de un porcentaje de grasa adecuado (estos datos te los puede ofrecer un médico nutriólogo mediante evaluación), establecer una dieta rica en proteínas, carbohidratos, vitaminas y baja en grasa, es crucial.
4 Consejos para marcar el abdomen
Ya sabes que no es ninguna fórmula mágica, sino disciplina y persistencia. Así que acá te damos cuatro consejos básicos para que vayas creando y mejorando
1- Realiza varias comidas al día
Una de las mejores formas de distribuir las comidas es tres principales y dos o tres pequeñas meriendas entre horas.
2- Opta por alimentos naturales e integrales
Sabiendo que el área abdominal tiene una terrible tendencia a guardar los mínimos de grasa en exceso que ingieras, procura siempre optar por alimentos naturales e integrales, pero:
3- Disminuye las grasas, no las elimines
Es aparentemente lógico pensar que eliminar las grasas de nuestra dieta es lo primero que debemos hacer. La verdad es que siempre es necesario cierto porcentaje de grasa para favorecer el buen funcionamiento de los órganos.
Por lo tanto, incluye grasas (preferiblemente naturales), entre las primeras comidas.
4- Requiere un soporte profesional
Un gran error que se comete es considerar la selección de alimentos por cuenta propia, y por algún motivo es que existen profesionales en el área.
Cada quien, por su estilo de vida, requiere cantidades distintas de calorías y nutrientes, por lo que, querer seguir dietas que no han sido elaboradas según sus necesidades puede ser una mala decisión
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